Antes de una revisión o instalación importante del cableado doméstico, el usuario deberá pensar en el principio de selectividad de los dispositivos de protección utilizados. Su elaboración e implementación competente mejorará la confiabilidad y facilidad de operación (mantenimiento) de los equipos utilizados. Pero primero, debe comprender qué es la protección selectiva y por qué se tiene en cuenta al instalar el cableado eléctrico.
Que es la selectividad
La selectividad es un método para seleccionar un circuito para encender dispositivos de protección, que permite desconectar solo las secciones de emergencia de la red eléctrica de manera oportuna.
Al mismo tiempo, el resto permanece en condiciones de funcionamiento. Esta solución técnica le permite no perder el tiempo buscando fallas en todo el apartamento, sino comenzar a descubrir la causa en una línea de cableado separada donde funcionó la protección.
Por otro lado, se entiende por selectividad la coherencia de acción de los medios de protección para parámetros muy específicos. Su tarea principal es el funcionamiento confiable del dispositivo de protección en presencia de perturbaciones en el funcionamiento de los circuitos eléctricos. Todos los demás equipos eléctricos en este caso continúan funcionando normalmente.
Tipos de selectividad
Se conocen varios tipos de selectividad de equipos, entre los que se utilizan con mayor frecuencia:
- Protección total y parcial del circuito.
- Selectividad de tiempo.
- Actual y tiempo-actual.
En la versión "completa" se utilizan al menos dos disyuntores conectados en serie. El primero en operar es el dispositivo que se encuentra más cerca del lugar de la falla (cortocircuito, por ejemplo). La protección parcial se diferencia de la protección total solo en la magnitud de las corrientes de arranque (ajustes dados).
En la tercera variante, se utilizan varios dispositivos conectados en serie con la misma configuración actual, pero que difieren en el tiempo de respuesta. Cada etapa reacciona a una falla (cortocircuito) después de un retraso previsto en ella. Si por alguna razón la primera máquina automática, calculada para 0,1 segundos, no funciona, por ejemplo, entonces el siguiente dispositivo debería apagarse (0,3 segundos) y así sucesivamente.
La protección contra sobrecorriente está organizada según el principio de selección de la magnitud de la corriente de emergencia. Es ella quien se usa con mayor frecuencia en condiciones domésticas. El siguiente tipo es una combinación de los dos anteriores, lo que permite aumentar la efectividad de la acción de los equipos de protección. También existe la denominada protección "direccional" utilizada en subestaciones transformadoras y destinada a secciones de circuitos.
Ejemplo practico
Un ejemplo de la selectividad más simple es la distribución de funciones en un armario eléctrico doméstico, donde se instalan una máquina automática de entrada común y su contraparte lineal (foto abajo).
Aquí, los dispositivos de 16 amperios protegen las líneas de las tomas de corriente y se apagan cuando hay cortocircuitos o sobrecorriente. El autómata introductorio representa la segunda etapa de este esquema, que se activa si el primer dispositivo por alguna razón no cumplió su función.